Con esta broma, a la gallega o bien a feira, nos referimos a la manera en que más tomamos verdura en casa: simplemente cocida con aceite, pimentón y sal.

Lo que más tomamos es col, pero también unas vainitas o cualquier otra verdura cocida sin más. Desde siempre consumimos muchísimo pimentón, sobre todo de La Vera, especialmente la variedad agridulce vuela a una velocidad de vértigo. Pero hay días en que el pimentón de Murcia es sencillamente perfecto; afrutado, dulzón… Después de acabar el plato de vainas aún me tomé un poco más de pimentón, a cucharadas.
Quesucos de Liébana
Estos pobres se habían quedado olvidados al fondo de la nevera, así que fue necesaria una operación de rescate. Tenía una selección de varios, por lo que pude salvar de uno y de otro para hacer una pequeña tablita.
Es otro gran desconocido queso de Cantabria. En la imagen: de oveja, vaca, cabra y mezclas. Cuando es joven tiene ese toque como «cálcico» y cremoso, al envejecer me recuerda vagamente a otros quesos maduros, como el Manchego o el Idiazabal.
Decir la palabra «quesuco» es bello; «quesuco de Liébana» es aún más bello. Se te llena la cabeza de recuerdos de los valles: de Polaciones, de Cabuérniga, del aire de los Picos, de Santa María de Lebeña, verdi país la tierruca.