Del verbo briochear de toda la vida.
Kilo de harina, docena de huevos, medio kilo de mantequilla. Sencillo. Bueno, y mediahoratrescuartos amasando.
Dos kilitos entre curso y curso el sábado. Pimpampún.
Del verbo briochear de toda la vida.
Kilo de harina, docena de huevos, medio kilo de mantequilla. Sencillo. Bueno, y mediahoratrescuartos amasando.
Dos kilitos entre curso y curso el sábado. Pimpampún.
Si fuera más cool, diría überpincho.
Bueno, aunque realmente lo que le pega a este fósil viviente es llamarse urpincho. ¿Habrá cofradía de esto? (De hecho, ¿no hay cofradía de la gilda?).
Directo a la carpeta de santos cotidianos.
El Lincolnshire Poacher es uno de mis quesos favoritos. Aquí, escoltado por un Montgomery, estupendos ambos, majestuosos monumentos lácteos.
Al mercado de granjeros al que íbamos en Inglaterra solían traerlo una vez al mes; las veces que coincidía y comprábamos una cuña de blue vein, se convertían en días memorables. Pedalear de vuelta a casa, hacía fresco en otoño. Un tallo de ruibarbo sobresaldría de la alforja llena de raíces, verduras y pan turco recién horneado. El carril bici de London Fields se llena de hojas caídas y, si no vas muy tarde, puedes todavía ver a los chavales jugando al cricket sobre la hierba. Pasar bajo las vías del tren, dejar atrás el gran Tesco y llegar a la casa de ladrillo.
Cuña de nostalgia patrocinada por la magnánima generosidad del amigo Munduate. Si Irantzu siguiese en La buena vida, molaría que la musicaran.
Ayer, el último gazpacho. Hoy, la primera mandarina.
Estaba buena.
De María.
Me contó que hace pesto con cualquier cosa que sale de su huerta, el de lombarda parece que está bien bueno. Este estaba ligado con avellanas.
Curso de panes navideños en Vitoria
Otro año más, «el ya tradicional» curso de panes navideños en 220º, en Vitoria.
En una intensa sesión de 4 horas, nos adentraremos en los secretos de las masas dulces: el ligero y aromático roscón, y el increíble panettone, con su laboriosa preparación con masa madre natural. Aprenderemos las técnicas de amasado, formado y horneado, los trucos para que estas masas luzcan como nunca en la mesa navideña. Se trata del reino de los aromáticos, de la mantequilla, de las frutas confitadas y todas las cosas que dan más gustirrinín. En clase elaboraremos y hornearemos un roscón de principio a fin, y elaboraremos un panettone para que cada alumno lo hornee en casa (ya que es un pan de fermentación lenta).
Dónde: 220º, calle Herrería 78, Vitoria
Cuándo: hay turnos el sábado 17 (10-14 h. AGOTADO) ; 17 (16-20 h. AGOTADO) y el domingo 18 (10-14 h.) de diciembre
Cuánto: 4 horas, 45 €
Cómo: información e inscripciones en 220º