Un momento de iluminación: el descubrimiento del semla.
Un bollo con mucha enjundia, tradicional antes de Cuaresma. La masa del bollo está enriquecida y tiene un toque de cardamomo (sin palabras). La miga, como la de otras masas dulces suecas, no es fofa ni tan ligera como muchas en España, sino que tiene cuerpo, un poco como un buen panettone; además de levadura, tradicionalmente se le pone también bicarbonato amónico. Una vez hecho el bollo, se abre la tapa, se quita un poco de miga y se rellena con una especie de crema de mazapán sobre la que se pone bien de nata montada. Esa es otra; la nata montada es bestial, no es la típica espuma insípida y dulce; esta nata es densa, casi se mastica, y al fondo tiene una nota de sabor, no diré agrio, pero sí de sabor que denota que proviene de leche de verdad. Finalmente, se vuelve a poner la tapa y se espolvorea con azúcar glas. El delirio.
Estuve leyendo donde encontrar unos buenos semlor en Uppsala, y ahí que me fui con Markus. Él es sueco, y creo que no ha visto en su vida un bollo de mantequilla, ni puede entender el momento de iluminación que un semla supone para un auténtico amante de los bollos. Le conté que nunca en mi vida olvidaré la mañana de domingo en la que descubrí el semla, a su lado, en Uppsala; él simplemente sonrió al escucharlo.
Tradicionalmente, el semla se toma en un tazón de leche caliente, a cucharadas, pero yo le ataqué a mano limpia, quitando primero la tapa, disfrutando un poco de la nata, y metiéndole luego directamente a la crema de mazapán y al bollo (esta cosa tan libidinosa me la aconsejó una sueca muy maja en la cola de la cafetería).
Por aqui, en Bilbao, se llaman bombas de nata o cristinas… uhmm que buena
Aqui, por Bilbao, se llaman bombas de nata o cristinas
¡¡ que ricas ¡¡
estoy salivando…mmmmmmmmmmmmm
Hola! Acabo de descubrir tu blog y me he quedado prendada de estos semlas! Tienen pinta de estar de vicio, y esta nata tan rica…. mmmmm lo que daría por comérmelos ahora mismo!
Con tu permiso voy a seguir descubriendo tu blog!
Un abrazo!
Sandra
por alguna razon me vienen a la memoria recuerdos de haber comido algo muy similar a lo que describes….y no consigo recordar donde o cuando los he comido…
duplidebilbao Realmente, aunque la forma pueda recordar a algo así, el resultado final no tiene mucho que ver; digamos que es una especie diferente :) La textura es mucho más recia, aromatizada con cardamomo, va relleno de mazapán, y la nata es diferente. Vaya, que es una masa dulce y redonda, pero hasta ahí llegan los parecidos con una Cristina.
Fogons de la Bordeta, bienenida. Yo vivía la lado de la Bordeta :)
Mapi, ¿en Escandinavia, tal vez? ;) (parece que los comparten la mayoría de los países nórdicos).
Uou! pues menudo descubrimiento, tiene una pinta buenisima, y me ha llamado mucho la atención que lleve cardamomo!
Mira tu por donde ! Quizás de momento no vas a echar de menos los bollos de mantequilla.
dios mio. un día quiero probar uno de estos. tiene pinta de perfección. almendras, masa de bollo, nata?!!! awww.
vas a traer unos cuantos?
¡Hola Ibán!
Hace algún tiempo que te sigo, pero nunca me había atrevido a comentar… Hasta ver ese «semla» tan delicioso. Como bien dices, es una iluminación.
¡¡¡Qué suerte disfrutarlo!!!
[…] del descubrimiento de los semlor, de ese momento mágico de comunión, llegó el momento de hacerlos en casa. Anders me dejó un […]
[…] del descubrimiento de los semlor, de ese momento mágico de comunión, llegó el momento de hacerlos en casa. Anders me dejó un […]
[…] de aproximadamente de 1 cm de espesor por unos 5 de diámetro. Después se pone nata montada (en plan finolis se hace con manga; en plan casero, a cucharadas), se vuelve a colocar la tapa y se espolvorea con […]