Bueno, digo yo que la transcripción sería algo como «quima carela».
Un curry de carne picada de cordero y esa amarga verdura que parece un pepino con verrugas. El sabor amargo me encanta combinado con un chapati calentito, que es como de sabor neutro.
Fue el otro día, en nuestro indio favorito (que realmente es paquistaní). Casualmente había habido un banquete, así que nos dieron también cordero asado del que sobró de la celebración. Son curiosas las cosas que te acaban pasando en estos sitios cotidianos a los que vas a menudo y coges confianza. Precisamente estábamos comiendo allí el día que cayó Musharraf (vaya fiesta había montada), y recuerdo también el día que empezó el último Ramadán (¡y el día que acabó!); ese día nos obsequiaron con una bebida de agua de rosas (además allí casi siempre tienen rasmalai).
Cuando vivía en Bilbao solíamos ir muy a menudo a un restaurante chino al lado de casa; nunca olvidaré que el 11-S comí sopa wonton, pato asado y helado frito; allí, en ese restaurante tan curioso de la calle Fernández del Campo, mirando incrédulos al televisor.
Y… ¿Dónde está ese vuestro indio favorito (que realmente es paquistaní)?
:)
Eso, eso; situemos el escenario convenientemente :) Me encantan esas historietas curiosas que pasan en el día y lugar menos pensado . Una vez toqué en una boda entre un catalán y una japonesa en la terraza de un hotel desde la que se veía el mar y todita Barcelona, qué vistas… Y qué calores, qué bien nos supieron las bebidas que nos ofrecieron (supongo que pensarían , que les den algo a los músicos que se nos desmayan!)
Ìbán, me parece que me he vuelto una adicta a las chapatas…a hacerlas y a comerlas…como siga asi mi médico va a ingresarme para hacer algún tratamiento de desintoxicación…Es broma, je je.
Nunca hubiera imaginado que me las veria con una masa tan liquida y que conseguiria algo decente y comible.
Un beso,Rosa
Maravilloso post!!!
Sr Ternasco, Pepa Maca, pues es el restaurante ZK (como pone en el plato, creo que es Zeeshan kababish) está en la calle Marqués de Barberá, la primera perpendicular a la Rambla tras pasar el Liceo; detrás del Liceo se llama «Unió», pero al lado de la rambla del Raval se llama Marqués de Barberá; el restaurante está allí, donde la calle desemboca en el centro deportivo/piscina del Raval. La carta es bastante amplia y cada curry sabe diferente, los panes son buenos y …¡tienen rasmalai! Un compañero indio (de la India) que ha ido dice que es el mejor que ha comido aquí, y que el arroz es bueno (yo nunca lo he probado).
rosa m, bueno, esa me parece a mí una muuuuuuuuy buena adicción, ¿no? :) Qué bien!!
pingue, ¡Qué cosas no nos pasan alrededor de la mesa! ¿verdad?
Me lo apunto. Pensar que viví en Bricklane y no fue hasta después de eso que me aficioné a la comida india… :(