Haciendo pan con las manos de otros

Internet, el e-mundo, tiene cosas buenas. La gente suele ser amable y (sobre todo en los blogs) tiende a mostrar su mejor cara y ayudar a los demas.

Y después Internet, el e-mundo, tiene cosas maravillosas, que te llenan de emoción, como este pan.

Pan en Paris

Ni lo he hecho, ni lo he olido, ni lo he fotografiado, ni me lo he comido. De hecho, ni conozco (bueno, ahora un poco) a la persona que lo ha hecho.

Ayer recibí un email con esta foto. Alguien, en París, había estado siguiendo los posts que hice hace unas semanas indicando cómo hacer pan de manera sencilla pero sin perder la esencia de lo que es un gran pan (precisamente para gente como él, anónima, con curiosidad, miedo o respeto a panificar).

Pues bien, haikumore (que así firmó el único comentario que puso en mi blog entonces) siguió las indicaciones para capturar la masa madre. No le salió a la primera, pero al final lo consiguió; y este es su primer pan. Recuerdo mi primer pan, así que imagino la emoción que sintió al verlo subir en el horno, al cortarlo y comerlo. A mi me embarga una emoción similar aunque distinta. La de haber hecho pan a través de las manos, de los ojos y las sensaciones de otra persona. No es la primera vez que lo hago, pero cada vez que veo que sale una buena hogaza a traves de las manos de otro, me emociono (ahora que no tengo horno me emociono más, si cabe). Por lo que me cuenta haikumore su horno es de esos pequeñitos (tipo microondas) y todavía no se aclara muy bien con todos los tipos de harina. Sin embargo, la satisfacción que ha producido esta hogaza supera todos los trabajos, dudas y esfuerzos.

Hoy es un gran día en el e-mundo.

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8 respuestas a “Haciendo pan con las manos de otros”

  1. Mar dice:

    ¡¡¡¡Mis enhorabuenas a Haikumore e Ibán!!! Me alegro muchiiiiiiiiisimo por vosotros. :_) (lagrimita y todo)
    Para los no-amantes de los fogones que no lo entienden habrá que decirles que la emoción que se siente es igual que cuando el equipo de un forofo gana la copa más importante del mundo, no?
    Oé, oé, oé, oé, oé, oeeeeeeeeee

  2. Roger dice:

    Que envidia, espero que la primavera llegue a mi casa (y con ella un ligero aumento de la temperatura) para que los «bichitos» despierten de su hibernación y me hagan una buena masa madre!
    Aun no tengo la biblia panadera de Dan L. , pero por casualidad encontré este mas genérico también de el y otro : «HORNEAR PAN, PASTAS Y PASTELES».

  3. Bea dice:

    Hola Ibán… yo conocí tu blog gracias a las indicaciones de la masa madre, que todavía no he tenido tiempo de hacer ( pero estoy en ello). El hacer pan ha sido todo un decubrimiento para mí, ya no es solo el placer de comerlo, sino de hacerlo , levarlo, amasarlo y cuidar la masa como si de un bebé se tratara (ojo!, que yo no tengo niños)… Espero poder publicar pronto una foto con el pan de tu masa madre. Muchas gracias. Bea

  4. Vega dice:

    ¡Felicidades a los dos! Mi tercer intento de masa madre se murió en el frigorífico durante la navidad. Buaaaa. Este fin de semana lo intentaré de nuevo. No saben los bichitos lo cabezota que es una.

  5. haikumore dice:

    ¡Hola! Aquí el aludido ;) Gracias Iban, por las fantásticas guías y por tus consejos. ¡Y por poner la foto que tan inocentemente hice de este primer experimento! Creo que va a ser la botella de Perrier más famosa de la blogosfera…

    Sigo con el pan, a ritmo diario mientras pueda (masita al frigorífico cuando no), con muchas ganas de practicar y de aprender, disfrutando a cada paso.

    Al que no lo haya intentado aún… ¡ya estáis tardando!

  6. SOL dice:

    QUE lindo post!solo lo entiende el que ha hecho su propio pan!jamàs me voy a olvidar cuando el año pasado me animè aprovechè un rato que tenia libre(por fin!) e hice mi primer pan!saludos iban!

  7. gemma dice:

    Buen maestro y buen alumno :-) Felicidades a los dos!

  8. Ibán dice:

    Mar,Bea,SOL, sí que es una emoción especial y difícil de expresar. Haber amasado los ingredientes, haberle dando forma con tus propias manos. Luego cortar la hogaza con cuidado o trocearla con las manos…mmm…algo muy especial.
    Roger, no te dejes intimidar por el invierno catalán. De hecho, el verano barcelonés imagino que no será nada propicio para la panificación (debido a las altas temperaturas). Sí, el libro está muy bien, yo tengo la versión inglesa. Es un muy buen libro de pan y pasteles, la verdad.
    Vega, tengo ya un post hecho acerca de esas masas que «se mueren» en la nevera…»permanezca en sintonía».
    Haikumore, me parecía que era una botella de Perrier…y eso me parecía taaan bonito… una foto enviada desde Paris, con un pan nuevo… y una botella de Perrier de fondo….comme c’est jolie!
    gemma, gracias!!

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