Era tan dulce aquella chirivía, tan dulce aquel pimentón, tan dulce aquella patata, tan dulce aquel repollo…
… que al final resultó que el salero contenía azúcar. Sí. Grandes maravillas de las mudanzas. Y venga a echarle sal.
Sopa de repollo, chirivía y patata
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Jo, lo que me he reído XD
¿Ya has encontrado la sal?
La sal la tenías en mi azucarero la tarde que anduve liado haciendo merengue!!!!!
Salao que es uno…
jaaaaaaaaaaaaaaaaaa! se me saltan las lagrimillas!!!
jajajajajaja! vaya despiste! menos mal que era una sopa y no una ensalada jajajaja
Un abrazo
jajjaja…y de postre qué tomaste?
Jajajajaja! Y que pinta la sopa! Con el frío que tengo y el hambre, me comía ese plato bien contenta.
Saludos!
Me encanta leerte, pero realmente se me ha saltado la risa con esta entrada.
Muchos besos!