Por fin, ya estoy instalado en Barcelona, pertrechado de un viejo horno y una conexión a internet.
Para celebrarlo y dar vida a la casa, me he puesto a fermentar. Unos bollos de canela suecos que siempre «hacen hogar» (bueno, reconozco que hice una masa grande, la dividí en dos, e hice dos rellenos; uno de canela y otro de cardamomo).
Mientras tanto, burbujean los botes de verduras en plena fermentación.
Hmmm…
Me recuerdan a los rollos de makowiec, que se cortan para hacer unos bollos similares.
Bon profit!
Ze onak!!
¡¡que buenos!! ¡¡me encantan esos bollos tipo caracolas!!
Me gusta mucho esta web, te sigo…espero verte pronto por mi «casa» a ver si te apetece lo que hay de postre para cenar..jja Me encanta el titulo de tu web, super ingenioso. Un saludo Acaramelada
Bienvenido, asi que has vuelto a BCN!!!
Has vuelto a Sants? Tienes previsto organizar algún curso nuevo?
¡No sabes el partido que le he sacado al curso de masas dulces!!! Aunque reconozco que se me atraviesan los croasanes!!
Fantasticas tus incursiones en «Robin Food»
Saludos
Marcos, en estas el relleno como que se infunde a la masa, en el makowiec está como más presente :)
Joaquín, sí, he vuelto a Barcelona :) No tengo el sitio aquel de cursos en Sants, pero sí que estoy dando cursos aquí, mira si quieres la página de cursos de pan :)
Y en breve habrá más Robin Food.
Iban, me encantan los Kanelbullar, en eslovaquia los llamamos avisperos (casas de avispas) y son deliciosos. Mi abuela y todas las mujeres de mi familia saben hacerla. Yo todavia ando verde en este campo.
Felicidades por tu blog, es muy inspirador y lleno de ideas. Siempre cuando chafardeo en el, termino salibando y recordando lo bueno que es el pan de eslovaquia!!!
Welcome back!
Ohhhhh bollos de canela, en todas sus variedades mundiales. A mi me hacen la ola en casa cuando hago los zewellen ( no recuerdo el nombre exacto ) cuya receta colgaste aquí. Probaré los de cardamomo.
Petonets, Alba
Querido Iban, soy un acérrimo seguidor tuyo, tanto en tus blogs como en tus incursiones en el bosque de Lasartewood con Robin Food. Pero tengo clavada una espina por no poder asistir a ninguno de tus cursos (me pillan demasiado lejos). Has pensado alguna vez en impartir algunos en esta Córdoba milenaria, tierra de bellos monumentos y bellísimas tabernas, donde yo habito? También llevo en mis genes, igual que tú, el amor por el pan, el alimento básico por excelencia, por los métodos telúricos para elaborarlo empezando por la masa madre (mola lo de telúrico; te quedó muy bien en el capítulo de las tostadas golfas y la masa madre). Y soy el feliz poseedor de un ejemplar de Hecho a Mano traducido por tí. Libro genial donde los haya, es de los que no te cansas nunca de releer.
Volviendo a lo de los cursos panarras, te pido que consideres, por favor, la posibilidad de dar algunos aquí en Córdoba. Me entusiasma tanto la idea que, si quieres, puedo intentar hacer averiguaciones sobre posibles sitios para realizarlos. Aunque supongo que tú ya conoces mi ciudad.
En fin Iban ya sólo me queda darte las gracias por esa labor de divulgación tan maravillosa que llevas a cabo con el pan.
Un abrazo.
Bienvenido a BCN!!! Lo celebraremos apuntándonos al curso de panes italianos.
Eiiii, esos bolecitos blancos los tengo iguales!