La granja tuvo vacas en su día, pero hoy sólo se cultivan plantas, así que los lácteos se compran. En cualquier supermercado (como en muchos otros países europeos, menos el nuestro) hay una gran variedad de leches frescas. En Suecia muchísimas leches que se venden «sin más» en el supermercado son de mucha calidad. Alrededor de la mitad de la oferta es de procedencia ecológica, y no es extraño encontrar cosas como «la leche a la antigua», sin homogeneizar ni «estandarizar» (eso pone) y con más del 4% de materia grasa. Un producto extraordinario a la vuelta de la esquina.
Sabe y tiene la textura de la leche, una sustancia translúcida con grumos de nata que dejan preciosos círculos grasos al fundirse en el té.
Me recuerda a la leche de la aldea. Lo cierto es que nunca me gustó, pero sin duda era auténtica.
Un abrazo
Manuel Bustabad
En lo de vender leche fresca en los supermercados, parece que la cosa va cambiando. Desde el verano pasado en el Condis de Poble
Nou tienen un surtidor de leche fresca, sólo es leche entera, pero la diferencia con las demás leches envasadas se nota!!!
Saludos
Dorothy
Mmmmm, que pecado esa grasita por ahí.
Me ha recordado a la leche que pillamos a un casero de Cabuerniga.
Muxuk
qué bonito, sin estandarizar, «cada leche es diferente» (dicho con el acento de Ferrán Adriá, como en el sketch que se marcó con Arzak…http://www.youtube.com/watch?v=CviuK4tWMiM)