Me trajo Marcos unas delicias polacas, desde una ciudad con puerto fluvial cuyo nombre tiene cuatro consonantes antes de la primera vocal.
Szczecin, s-z-c-z-e-c-i-n. Incluso me enseñó a pronunciarlo.
Me fascinan los ahumados del centro de Europa, pescados, embutidos, carnes, me da igual. En 1992 compartí una nevera en Escocia con polacos y eslovacos, el olor de sus embutidos es algo que me acompañará siempre. Este olor vuelve de cuando en cuando; ayer fueron unos kabanosy que no esperaba. Después, unté una rebanada de pan del bueno con bien de mantequilla y le puse jamón dulce con salsa de rábano picante, como me indicó Marcos.
El encanto de las ciudades con puerto fluvial: Hamburgo, Tulcea, Nantes, Bilbao.
Sé perfectamente de qué olor hablas… mmmmmm… si cierro los ojos, puedo olerlo.
si, se supone q no es muy bueno pero en pequeñas dosis lo hace todo más sabroso.. el domingo fui invitada a un cocido maragato hecho con trozos de tocino ahumado entre otras delicatessen, y fue una pasada… todo, ahumado, sabe mejor
En Cantabria tenemos unos quesos ahumados que son mi perdición…