Garbanzos fritos, tostaditos y llenos de sabor; con anchoas y salsa sriracha.
Desde hace años nunca nos falta en casa un bote de sriracha. La primera vez que la compramos fue hace años en el supermercado chino del subterráneo del parking de la Plaza de España en Madrid.
La sriracha es una salsa tailandesa picante (no demasiado picante) de pimiento rojo y ajo. Es bastante cochinota y tiene muchísimo sabor, así que anima cualquier cosa. Si abres la boquilla y aprietas el bote sale un aroma casi gazpachoso. Esta de la marca Suree no es la mejor que hemos tenido; hay una que tiene como marca un gallo (o un pato) y es deliciosa. Por suerte, se encuentra en las tiendas de productos asiáticos de cualquier ciudad medianamente grande.
No si tú, de cualquier guarrada haces una delicia ;)
Por cierto, me tienes al Tonsito acojonao con eso del Laugen-tonisito :D
Un beso!
No mujer no…era porque ya te veía toda emocionada con el laugen…bañandolo todo…los panes, los cruasanes, y cualquier cosa que se te pusiera a tiro…tonisito incluído ;)
[…] Rebanada de pan de espelta de Gallecs, tostada de centeno blanco y pasas con aguacate y ajos asados (y un poco de Sriracha), y sandwich de aguacate con restos de pollo dominical a la mostaza con pan de mil harinas (trigo aragonés y manchego, y harina ahumada galesa). […]