Poco a poco se acerca el día de la mudanza y seguimos en «modo vaciar el armario de porquerías», con lo cual van cayendo a la cazuela cosas que teníamos escondidas detrás del arroz y las legumbres.
Hoy ha tocado cena rápida (y guarrilla) para uno, así que ha sido el turno de un alimento especial, un producto del «reverso tenebroso», por así decirlo: el mock chicken, o pollo de mentiras. Realmente se trata de gluten de trigo procesado y preparado con forma, textura y sabor de pollo, ¿da miedo eh? A los chinos (y a mí) les encanta, tai hao le!
Para los que estén acostumbrados al tema vegetariano-alternativo, es algo parecido al seitán, de hecho lo comercializan como vegetariano, aunque mi idea del vegetarianismo no podría ser más opuesta a esto. Cuando vivía en Bilbao me aficioné al sabor y textura totalmente artificiales de este producto (anque entonces solía comer más la variedad de pato, mock duck), y todavía hoy en día suelo guardar una latita de mock duck o mock chicken en el fondo de la despensa, para cenas rápidas en la ciudad solitaria.
Esta noche lo he cocinado con pasta china de huevo, que se cuece en un pis pas. Mientras se calentaba el agua y se cocían los noodles, he pasado rapidamente por la sarten un poco de cebolla y salsa de soja, para que cogiera color y diera un poco de vida a «la cosa», et voilà! …Haute cuisine du glutamate monosodique! Sutil.
Ufffff… en ocasiones como ésta envidio a mis amigos los gemelos celíacos…
No desestimes el lado oscuro de la fuerza, Luke!!! porque ademas te dire otra cosa…asi entre nosotros: «YO soy tu padre, GHHHHHH» (esto ultimo es la respiracion a traves del aparatejo ese que tiene Darth Vader en la cara)
Cuidadín con el mock!!! Que puede parecer muy apetecible en estas fotos y luego la realidad es dura, muy dura…ese saborcillo a cartón mojado. Yo mira que no tengo problemas con las texturas y sabores vegetarianos, soy «fans» de cualquier derivado de la soja, pero el mock por mucho que lo intento y mucha soja que lo aderece… no hay manera.