El otro día organizamos una comidita con los amigos, con la idea de que cada uno llevara algo. Como tenía la albahaca a reventar, se me ocurrió llevar un pesto casero, que es sencillísimo de hacer e inigualable en sabor y frescura. Pero, como cuando me pongo estupendo no hay quien me pare, decidí hacer dos-pestos-dos. Así que desempolvé la receta del pesto de nueces, ajo y cilantro, que resulta tan fragante y aromático como el tradicional pesto a la genovesa hecho con albahaca y quesitos ricos de Italia.
Para el pesto de albahaca me hice con unos piñones, parmesano, pecorino romano y arrasé mi Liguria de bolsillo… que, aunque es de supermercado y crece bajo la tenue luz británica, no está nada mal para esta isla.
El pesto de nueces es aún más sencillo. Simplemente se trituran nueces con ajo y aceite de oliva, y se le añade cilantro molido (cilantro en semilla, se entiende), una pinta de comino y se corrije con sal y limón. Esta vez me pasé al triturarlo, y me quedó una pasta demasiado fina, a mi me gusta más crujiente, con buenos cachos de nuez.
Estos dos pestos me encantan con pasta corta, por lo untuoso y casi sensual del resultado. Ultimamente me estoy aficionando a un tipo de pasta que no es difícil de encontrar por aquí (de hecho, la hay de varias marcas). Son pastas importadas de Italia y que están hechas con moldes de bronce. Son fácil de distinguir, porque tienen un aspecto mate y blanquecino (son ásperas al tacto, al contrario de las mas tradicionales en España que son como brillantes y amarillentas), y porque luego quedan deliciosas para salsas contundentes como estas. Cuando las hierves, el olor varía algo respecto a las de-toda-la-vida y casi recordaría (muy lejanamente) al aroma que suelta la pasta hecha en casa al cocer
Vaya, vaya! Nosotros también nos juntamos en la terraza de unos amigos y cada uno llevó algo para comer. Tengo que postear nuestra aportación: un pincho de queso idiazabal con tomates secos sobre pan casero. También llevamos humus ; )
Este pesto casero que has preparado tiene una pinta deliciosa. Yo nunca me he animado a hacerlo… No se por qué, pero algunas cosas siguen dándome como… ¿miedo? *_*
ay…estos encuentros veraniegos :) comomolan. Es una pena que aqui en Londres se hayan suspendido hace semanas los picnics…porque NO PARA DE LLOVER, hacia tiempo que no veia llover asi, y eso que soy de Bilbao, je!
Lo del pesto te animo con todas mis fuerzas…simplemente te dire que no hay nada como el pesto casero, NADA. Para que te lo imagines…simplemente cierra los ojos e intenta mezclar el olor fresco de…
– Buen aceite de oliva
– Ajo recien machacado en un mortero
– El aroma incomparable de la albahaca recien cogida de la planta
– Paremsano y pecorino recien rallados… ohhhhhhhhhhh
No te digo nada de como huele cuando pones los piñones y el ajo en el mortero y empiezas a majar aquello…es indescriptible. Conozco mucha gente (me incluyo) a las que el pesto fresco hecho en casa les despierta algo que es casi como una pasion sisuá ;) (telojuro), tal es la fuerza de esto… asi que venga, hazte con una albahaquita!
Hola, me gusto, mucho tu sitio, y me gustaria usar alguna de tus recetas para una publicacion sobre comida gourmet para jòvenes que estamos haciendo en Santiago de chile.
Si te gusta la idea, por favor mandame un mail a mi mail.
Muchisimas gracias!