El cordero de Ana

Un cordero estofado con patatas, setas, almendras, azafrán y muchas más cosas; incluída esa mezcla de vinagre y miel que recupera sabores ancestrales.

Cordero con patatas, setas, azafrán y miel

No son ni melocotones, ni manzanas, son las patatas teñidas por los jugos y los aromas del azafrán, las setas y el cordero. Se te deshacía todo en la boca y, por si fuera poco, a mí me tocó el jarretico.

Esta entrada fue publicada en Animal, ¿Vienes a cenar fuera?. Ir al permalink. Los trackbacks están cerrados pero puedes publicar un comentario.

5 respuestas a “El cordero de Ana”

  1. Bea dice:

    Hola Iban, fíjate que nunca se me ha ocurrido hacer el cordero estofado, siempre hago la paletilla al horno… creo que voy a probar el cordero de Ana, jeje. Un saludito. Bea

  2. Vega dice:

    Madre mía qué pinta tiene eso. ¿Pero, por estas fechas, no tocaba dieta post-navideña?. Me vais a matar entre todos.

  3. Ibán dice:

    Bea, el cordero estofado, cualquiera que sea su variedad (el plan español, en plan tagine,etc) es algo fuera de este mundo, ese aroma…mmmmm. Pero, claro, el cordero es, sin duda, mi carne favorita.
    Vega, déjate de dietas y marandangas. Hay que comer bien todo el año, ya sea en casa o fuera…y ahí andamos ;)

  4. madre mia que pinta mas buenisima tengo que probarlo

  5. El cordero de ana.. OMG! :)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *